Hilo de Tanza es, ante todo, un modo de ser, de sentir y de vivir. Aquí tienen cabida la pesca de altura y la de bajura: los deseos, las opiniones, las críticas y los sueños de quienes no hallamos un mejor modo de darlos a conocer. Quizá encuentres tu lugar en este océano de voces.

sábado, 24 de enero de 2015

LA PERLA NEGRA


       Soplan vientos nuevos, vientos tropicales y cálidos, vigorosos vientos del este que alejan las nubes de un cielo encapotado. Lo que, en principio, era una brisa refrescante se está convirtiendo en un verdadero ciclón que arrasa con las estructuras carcomidas de un mundo demasiado viejo y demasiado podrido.
      Y es que mañana Grecia celebra elecciones mientras los cadáveres de los Padres de la sacrosanta Europa se revuelven en sus tumbas, mientras los bien amañados partidos de las seudo-democracias se comportan como la niña de El Exorcista a la vista de un crucifijo, mientras se emperran en meternos miedo con el Hombre del Saco.
        Los votantes del PP son como La Perla Negra. Aparecen sin preaviso y arrasan, pero, cuando las cosas comienzan a pintar mal, se esfuman como si jamás hubiesen existido, volviendo a las profundidades de un insondable abismo desde donde esperan escrutando el horizonte. A su mando, un mítico Capitán Barbossa dirije a su hueste de muertos y corruptos, de fantasmas y fanfarrones que buscan hacerse con un ínfimo pedacito de tesoro...
       Ayer mismo se reunieron los Pepeístas, al calor del fuego de las mayorías, despeinados por el vendaval los unos y espumando por la boca los otros. Solamente les queda disfrazar a José Mª Aznar de Santa Rita, patrona de los imposibles, y llevarlo en procesión recorriendo la geografía nacional, acompañado de  Mª Dolores de Cospedal vestida de mantilla. ¡Vaya espectáculo! Tuvieron hasta que desenterrar a alguna que otra víctima del terrorismo para arengar a sus ejércitos. Otros cadáveres llevan descansando casi ochenta años en fosas comunes y parece casi un insulto nombrarles.
       No tengo yo madera de quemaiglesias  ni de nada parecido, pero ya está bien de asustarnos con el Diablo Rojo. Esas cosas las estudié en el colegio, en el instituto y en la universidad .Siempre me resultaron el colmo de la estupidez. También lo son los radicalismos injustificados o las alternancias al estilo Cánovas-Sagasta, tan célebres en la historia de este desventurado país, y de las que parecemos no librarnos jamás.
       Lo que sucede es que somos muchos los que estamos hartos de toda esta farsa, los que no albergamos esperanzas de que las cosas cambien. Sabemos muy bien que lo que se hace a mayores es dar una capa de pintura para tapar las carencias, pero no se ataca al núcleo de la podredumbre. Somos conocedores de que la igualdad ante la ley, los derechos constitucionales y el supuesto estado de bienestar son las drogas con las que adormecen nuestros sentidos para que no veamos las cadenas que nos atan. No sé si PODEMOS librarnos de las mentiras, pero sí que DEBEMOS.
       La casta política, que existe del mismo modo que los agujeros negros ( no somos capaces de verlos pero notamos sus efectos), anda revuelta . Debe ser como el gallinero que presiente la llegada del zorro y empieza a cacarear desordenadamente, mientras unos animales se pisan a otros buscando salvación. En Europa reina el caos ante la duda de si la enorme tómbola, que se han montado unos pocos, sobrevivirá mucho más tiempo. Veremos que pasa.
       Esta tarde, a muchos kilómetros de distancia del Egeo y  de sus aguas tintadas de añil, de la Acrópolis vestida de novia, sueño con un futuro en el que sea posible albergar esperanzas, en el que recuperemos la ilusión y la fe en el ser humano, en el que podamos criar a nuestros hijos sin miedo y con verdad. ¿Por qué no aventurarnos? Algunas cosas ya se han perdido, pero tal vez existan  alternativas nuevas , miradas nuevas en las que encontrarnos. Hace no tanto tiempo, también el Atlántico estaba repleto de monstruos.

                                                      Kali-Nykta, Onira-Glyka.

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